La concienciación sobre la igualdad femenina en el deporte está adquiriendo cada vez más penetración en la sociedad, pero todavía tiene un largo camino por recorrer. La Administración Pública es uno de los principales referentes en este ámbito, y goza de diversos proyectos y programas orientados en esta dirección. La subdirectora general de Mujer y Deporte en el Consejo Superior de Deportes, Bárbara Fuertes, explica en el programa Empleo Público cuál es la situación actual y cómo está evolucionando la función pública en este aspecto. Además, Bárbara Fuertes pertenece al cuerpo superior de administradores civiles del Estado.

La entrevista comienza refiriendo la experiencia personal de Bárbara Fuertes y por qué decidió entrar en la función pública, a lo que ella responde que, pese a que estudió Derecho, no era su primera opción. «Mi primera opción era Historia, pero por una cuestión práctica hice Derecho, y descubrí un mundo fascinante en la parte de derecho público«, asegura la invitada. «No se conocía esta salida laboral, y vi un mundo inmenso de posibilidades», reconoce Fuertes. Además, esta aproximación al derecho público fue el trampolín perfecto para opositar.

«Sabía que opositar era la mejor opción, pero quería darme un tiempo para experimentar otras cosas. Al principio, la oposición me daba miedo, y empecé a trabajar en el extranjero mientras tanto. Sin embargo, no tuve suerte, y empecé a estudiar la oposición. En ese momento, me doy cuenta de que el mundo a mi alrededor evoluciona. Entonces, empecé a trabajar en una academia de oposiciones al tiempo que preparaba mi oposición. Esto me permitió ver el vínculo humano de los opositores desde la otra parte», explica Bárbara.

Antes de conseguir su posición actual, Bárbara Fuertes ha desempeñado diversos puestos dentro de la Administración. Comenzó en el Ministerio del Interior, un puesto que tuvo que elegir, pero que no era su primera opción. Esto le sirvió para darse cuenta de que, a veces, lo que parece que no nos va a encajar, termina siendo nuestro trabajo perfecto. «Después, fui a Relaciones Internacionales de Telecomunicaciones, que no tenía nada que ver con mi puesto anterior», afirma Fuertes. Una prueba de la gran versatilidad horizontal que ofrece la Administración.

Con respecto a la vocación de servicio público, Bárbara afirma que «acabas integrando la filosofía de que aquello en lo que trabajas no tiene que tener, necesariamente, una transacción económica. Formas parte de una cadena, y trabajar en la Administración te vuelve más humilde en la medida en que eres un eslabón de esa cadena. Y, además, la mentalidad es totalmente diferente de la que tiene el sector privado, donde es más productiva y económica», reconoce Fuertes.

Igualdad, Mujer y Deporte: un trío inseparable

En su función como subdirectora general de Mujer y Deporte dentro del CSD, Bárbara Fuertes afirma que «este puesto es todo un regalo». «Nuestro objetivo es diseñar e implementar políticas para que la igualdad sea real y efectiva. Para ello, identificamos cuáles son los obstáculos y barreras que nos impiden determinar cuál es la igualdad real. Después, hemos de analizar qué posibilidades tenemos como Administración Pública», explica Bárbara.

La Administración tiene muchas capacidades, sobre todo económicas, normativas y relacionales, pero debe conocer cuáles son sus limitaciones, principalmente, las competencias autonómicas. Por ello, desarrollan políticas de liderazgo, de formación, de protección y de sensibilización y visibilidad de la mujer en el deporte, tal y como explica la invitada.

«Como Administración, tenemos el deber de aterrizar el principio de igualdad, y debemos dar ejemplo. Es imposible predicar y trabajar en la igualdad de la mujer si no nos sentimos apoyados en estructuras de la Administración y no damos ejemplo», reconoce Fuertes. Además, «también trabajamos en la vertiente social del deporte, con colectivos que tienen sus necesidades específicas, como las personas discapacitadas o en riesgo de exclusión social», afirma. De hecho, la invitada reconoce que el deporte es una herramienta para lograr una integración social que les permita tener oportunidades reales y efectivas.

En este sentido, Bárbara Fuertes destaca la igualdad en el acceso a la función pública, donde hay una igualdad total para hombres y mujeres. «Las oportunidades de acceso son iguales para funcionarias y funcionarios, tanto en conciliación, como en salario y otro tipo de ventajas», destaca Fuertes.