Si estás inmerso en un proceso de oposición, sabrás que la figura del profesor o preparador de oposiciones es fundamental para tener éxito en el mismo. No solo por su experiencia formando a otros opositores, sino también porque sabe en qué aspectos conviene más centrarse. En este programa de Empleo Público, Gabriel Fernández, preparador de oposiciones, explica por qué cualquier opositor debería contar con un preparador o una academia especializada en la formación de opositores.

Gabriel Fernández explica qué le llevó a ser preparador de oposiciones. Es ingeniero de caminos, y cuando decidió opositar, tenía claro a qué cuerpo hacerlo, de Administradores Civiles del Estado. «Yo no aprobé a la primera, y el tener que volver a enfrentarme al proceso me ha dado mucha confianza para convertirme en preparador y ayudar a otros opositores», explica Gabriel. La labor más destacada de esta figura es bastante multifacética, «desde aspectos motivacionales, de pseudo-psicólogo y, por supuesto, la labor formadora, tanto en el contenido como la forma», revela.

«Nuestra experiencia y conocimiento en la Administración nos permiten destacar los aspectos que son más importantes o resolver todas las dudas. Sabemos qué materias son más fáciles de trasladar para ayudar a los opositores», destaca Gabriel. Por otro lado, habla de la importancia de «la forma». Por ejemplo, explica que muchos de los candidatos que se enfrentan a un ensayo suelen suspender por no haber prestado la suficiente atención a los aspectos formales.

Algo similar sucede con los opositores que vienen del ámbito universitario. El proceso de oposición y el examen no tienen nada que ver con los que han realizado en la universidad. En este aspecto, Gabriel destaca que «en un examen universitario es determinado. Sin embargo, en la oposición es un contenido dinámico. En gran medida, responde al funcionamiento de nuestro sistema político, que es cambiante».

Conocer al opositor es clave para un preparador de oposiciones

«Una de las grandes virtudes de los preparadores es que entiende muy bien las distintas fases en las que el opositor se encuentra«, esgrime Gabriel. Pone como ejemplo la sensación que tienen los opositores que, mientras estudian, están trabajando. «Los preparadores no tenemos que decir a los opositores qué tienen que hacer. Nuestro cometido es ser honestos con sus posibilidades para aprobar y ayudares a decidir», revela el invitado.

Con respecto a la labor motivacional, «es una parte fundamental de los preparadores», asegura Gabriel. Para diseñar la estrategia adecuada a cada opositor, según su personalidad y perfil, «es importante ir conociendo a los opositores, y enfocarte en las facetas en las que pueda necesitar más refuerzo».

Otra de las cuestiones que destaca Gabriel Fernández es que «los preparadores tratamos de trasladar las condiciones del examen a los opositores. Esto les ayuda a saber exactamente a qué se enfrentan».  En definitiva, contar con una orientación profesional es clave para preparar con éxito cualquier oposición.