Uno de los grandes sueños que tienen muchas personas es viajar por todo el mundo, conocer nuevas culturas y experimentar vivencias en países diferentes. Sin embargo, en la gran mayoría de los casos no se puede cumplir debido a la incompatibilidad con el trabajo. Pero, ¿sabías que la Administración Pública sí ofrece esta posibilidad sin que pierdas la plaza fija que has conseguido al aprobar una oposición? Marta Estévez, funcionaria en activo del Cuerpo General Administrativo del Estado, nos cuenta su propia experiencia al respecto sobre la itinerancia en la Administración. Si quieres escuchar la entrevista completa, haz clic aquí

Marta comenzó su andadura en la Administración Pública tras una decepción al finalizar su carrera, y decidió preparar oposiciones al cuerpo de Hacienda. Finalmente, aprobó la oposición de cuerpo auxiliar de la Administración del Estado y se fue a Canarias. En aquel momento, su espíritu aventurero le pedía algo más, nuevos horizontes. 

En ese momento, se enteró por casualidad de las posibilidades de itinerancia en la Administración y de solicitar un destino profesional relacionado con el sector público fuera de España, y así lo hizo. Este paso le llevó a la Embajada de Nigeria, un país alejado culturalmente, pero que para ella supuso una motivación muy importante. 

No contenta con eso, cinco años después, Marta vio otra vacante en la Administración Pública en Sudán. La permanencia en un puesto exterior tiene un máximo de cinco años, tras lo cual, en lugar de volver a España, decidió seguir sus aventuras por el mundo. “En ese momento, África se me había metido en la piel, no quería salir de África”, afirma Marta.

Esto fue lo que le llevó a solicitar la vacante para Sudán, que finalmente consiguió. Ya el propio cambio de embajada de un país a otro es muy intenso, pero la experiencia, como ella misma revela, “es de las más enriquecedoras de mi vida”. 

 

Reinventarse siempre es posible en la Administración

Cinco años después, y tras cumplirse el plazo máximo, Marta decide volver a España durante un período aproximado de dos años. Justo en ese momento, irrumpió la pandemia, lo que modificó sus circunstancias personales. A día de hoy, continúa en Madrid, aunque no descarta volver a solicitar una plaza en un destino exterior y seguir con su camino de itinerancia en la Administración. 

“No compensa salir fuera de España solamente por el aspecto económico, sino que hay que tener una motivación que trascienda, una vocación real de viajar y vivir otras culturas”, asegura Marta. 

Marta habló también de la posibilidad de promocionar internamente, algo para lo que afirma que “hay que prepararse, aunque haya una parte de concurso, es fundamental preparar adecuadamente el examen para conseguir la promoción”. 

Además, asegura que promocionar en la Administración es un proceso al que se puede optar relativamente rápido. Esto puede animar a los opositores a entrar en la Administración en una escala básica y, posteriormente, ascender dentro de ella.

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